Cuidar con sentido: el impacto invisible de las cuidadoras en la sociedad

En España, más de 1,3 millones de personas trabajan cada día ofreciendo cuidados a personas mayores o en situación de dependencia. Sin embargo, gran parte de su labor sigue siendo invisible. En el Día de las Cuidadoras (5 de noviembre), desde Qida queremos rendir homenaje a todas las personas que dedican su tiempo, energía y corazón a cuidar de los demás.

Cuidar no es solo un trabajo: es una vocación que sostiene la vida, un acto de humanidad que merece ser reconocido y valorado. Hoy reflexionamos sobre la importancia del cuidado y el papel esencial de las cuidadoras en nuestra sociedad.

 El cuidado en cifras: una labor esencial y poco visible

El cuidado es uno de los pilares fundamentales del bienestar social, pero también uno de los más infravalorados. Según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, casi el 85% de las personas cuidadoras en España son mujeres, muchas de ellas con jornadas largas, salarios ajustados y poco reconocimiento público.

A pesar de su impacto, el trabajo de las cuidadoras suele desarrollarse en entornos privados o domiciliarios, lo que lo convierte en un esfuerzo silencioso pero imprescindible. Sin ellas, el sistema de atención a la dependencia simplemente no funcionaría.

Además, se estima que el valor económico del cuidado informal (el que realizan familiares sin remuneración) podría equivaler a más del 15% del PIB nacional. Estas cifras evidencian algo claro: cuidar sostiene no solo a las personas, sino también a la sociedad y la economía.

Testimonios que inspiran

Detrás de cada jornada, cada sonrisa y cada gesto de cuidado, hay una historia. En Qida creemos que dar voz a las cuidadoras es una forma de reconocer su valor y visibilizar su impacto real.

Rosario nos comparte su experiencia de cómo es su cuidado en casa gracias a la gestión del Servicio de Atención Domiciliaria (SAD) del Consell Comarcal del Baix Empordà, donde Qida colabora como entidad prestadora.

Cuando a la madre de Carmen le diagnosticaron Alzheimer, la preocupación por cómo afrontar su cuidado era inmensa. Sin embargo, gracias a nuestra colaboración con Pensium, consiguieron cubrir los cuidados que su madre merece sin perder la propiedad familiar.

Estos testimonios de Qida muestran que “cuidar” no se reduce a una serie de tareas: es escucharse, acompañar, respetar, entender que la persona a la que se cuida tiene historia, dignidad y un mundo propio. Visibilizar estas historias es una forma de reconocer que la labor de las cuidadoras tiene profundidad, impacto y sentido social.

Porque cuidar también es transformar vidas

En este Día de las Cuidadoras, queremos decir gracias a todas las personas que hacen del cuidado su vida diaria. Gracias por su energía, su calidez, su capacidad de estar presente cuando hace falta, por leer entre líneas, acompañar sin alboroto y sostener aquello que no siempre se ve.

Porque cuidar con sentido es sembrar vida, generar conexiones y transformar el mundo desde lo que a menudo permanece invisible.

En Qida estamos orgullosos de estar a vuestro lado, de aprender de vosotras, de acompañaros y de seguir construyendo un futuro en que el cuidado sea reconocido, valorado y visibilizado.

💛 Gracias por cuidar.